La Associació de Municipis per la Independència (AMI) es el equivalente de la Udalbiltza del País Vasco, una red de ayuntamientos y cargos municipales que tiene como objetivo asentar las bases de la administración nada más proclamada la república catalana. Los ayuntamientos separatistas se consideran los cimientos de la independencia y trabajan activamente tanto para incumplir la legislación en materia de símbolos y banderas como en la promoción de entidades separatistas y de actos de desobediencia civil.

En la AMI hay ayuntamientos de todos los partidos, incluido el PSC, que también ha votado a favor de la participación en la entidad en municipios donde no gobierna. La presión separatista en los ayuntamientos es máxima y, por ejemplo, Castelldefels, arrebatada al PP por un pacto del resto de fuerzas (podemitas, de las CUP, de ERC, convergentes y socialistas) ya forma parte de los 720 municipios y 40 entes locales (consejos comarcales y diputaciones) de la AMI sobre el total de 947 poblaciones que forman la región.

Los estatutos de la organización son una auténtico “argumentario” del nacionalismo, con la inclusión de todos los tópicos supremacistas y victimistas del catalanismo. Una de las muestras más destacadas de la superioridad separatista queda clara en una de las frases que se incluyen en esos estatutos: “Sabemos que, en Cataluña, el trabajo, la ciencia, las artes, el pensamiento siempre han estado en la vanguardia de la realidad y del sentimiento del pueblo, en contraposición a la dedicación de las élites españolas de habla castellana, dedicadas a la gran administración, el ejército y la judicatura“.

Así pues, la división es evidente y mientras los catalanes están dotados de un espíritu sensible y un particular sentido del trabajo, las ciencias y las artes, el español es funcionario del Estado, militar o juez, un parásito que vive del erario expoliado a la laboriosa, productiva y moderna Cataluña.

El texto de la AMI suscrito por los alcaldes no tiene desperdicio en materia de odio a España y autoestima nacionalista, un compendio del “pensamiento” oficial dominante en el que Madrid es la metrópoli y los catalanes son un pueblo oprimido a quien no se aplica el derecho de autodeterminación universalmente reconocido. Así, se puede leer: “Conocemos que las estructuras de poder de las metrópolis no permiten fisuras legales en su seno que posibiliten a los pueblos a ellas sometidas manifestar de forma efectiva sus anhelos de libertad, por tanto, cualquier iniciativa, por pacífica que sea, debe ser ahogada con sentencias de tribunales encastados en las mismas estructuras, con iniciativas legislativas agresivas por parte de mayorías ajenas al pueblo y con actuaciones coercitivas del poder ejecutivo central”.

El contenido íntegro de los estatutos de la AMI se puede consultar en esta dirección. La Guerra de Sucesión es uno de los capítulos especiales, así como la cualidad “milenaria” de la nación catalana, razones para formar un Estado propio ante la situación cuasi bélica, un Estado catalán que “posibilite vivir en paz y haga posible el trabajo de nuestra gente sin ser expoliados ni expoliar”.

Fuentehttps://www.libertaddigital.com/espana/2015-08-23/los-insultos-a-espana-y-a-los-espanoles-de-los-alcaldes-separatistas-1276555485/

Información: https://www.patriotas.org/web/?p=21400