El pasado 12 de marzo el Ayuntamiento de Corella, Navarra, por decisión de la corporación socialista presidida por Jorge García Izal, alias «Gorca», retiró el busto en homenaje al eminente falangista vizcaíno, Secretario General del Movimiento y varias veces ministro D. José Luis Arrese Magra.
Arrese se empeñó, y consiguió a contracorriente, dotar a todos los españoles de viviendas dignas en propiedad a precios económicos, y que fue declarado, hasta la fecha, hijo predilecto de Corella en 1941. Fue defenestrado del Gobierno español junto con otros grandes falangistas también destacados en su lucha por mejorar las condiciones sociales y laborales de infinidad de españoles, como Antonio Mª de Oriol y Urquijo y Jose Antonio Girón de Velasco, por virtud del golpe de Estado que en 1958 perpetraron los liberales del Opus Dei, padres de la actual democracia masónica en España.
Su busto era objeto de constantes ataques y burlas por parte de la chusma proetarra educada en las escuelas democráticas de Corella. Por ello, La Falange Navarra considera que es mejor que haya sido retirado. Igualmente decimos del Monumento a los Caídos de Pamplona, cuyo derribo ya ha sido decretado desde el Consistorio y el Gobierno proetarras de Navarra, y cuyo tesoro, los huesos de nuestros camaradas caídos en la Cruzada, fue entregado cobardemente y sin combate por ciertos miserables que se autodenominan carlistas.
A pesar de que desde el Parlamento Navarro se pretende sancionar y encarcelar a los que no aceptamos esta ley de desmemoria histérica marxista, que tan feliz hace a los del tiro en la nuca y las bombas lapa, no cejaremos en el empeño en reivindicar la VERDAD histórica. No será la primera vez que nos encarcelan por ello.
