Hace 84 años de ese 19 de julio de 1936 en el que un grupo de cincuenta Falangistas llamados “Voluntarios de Santiago” no dudaron un segundo en presentarse en el Regimiento Valladolid 20 para ofrecer sus vidas por España. En unos cuantos días llegaron a ser más de doscientos, formando así, dos centurias llamadas “La Campana de Huesca” y “Voluntarios de Santiago”, terminando después de unos meses con su integración en la 4ª y 6ª Banderas de Falange Aragón hasta el final de la contienda.
A primeros de agosto lucharon contra la columna anarquista Ascaso, cayendo los tres primeros camaradas Federico Cañiz, Luis Durán y José María Torrens. El ejército rojo pretendiendo una y otra vez pisar Huesca no consiguen más caer siendo prisioneros de estas centurias a las que fueron reforzadas por requetes y tropas de Africa, juntándose en Estrecho Quinto más de seiscientos hombres, sufriendo más de una emboscada que sesgó la vida de doscientos valientes, siendo más de cuatrocientas bajas las del ejército rojo.
Durante los días 21 y 22 de octubre, más de doce mil rojos pertenecientes a artillería e infantería pretenden romper el cerco una y otra vez siendo rechazados por estos heróicos camaradas.
El 27 de junio de 1940 la 6ª Bandera de Falange Aragón es condecorada con la medalla militar colectiva por la defensa de la ciudad de Huesca y días más tarde se homenajean a los valientes caídos en Estrecho de Quinto como se puede ver en la nota de prensa de los diarios de la época.
Con el transcurrir de las décadas, este hecho glorioso como tantos otros se intenta ocultar bajo la memoria histérica de los perdedores que como en tantas ocasiones pretenden ganar con el olvido una guerra que perdieron.
Estos camaradas se reflejaron en esta y otras citas de la época que ayudaron a que su espíritu no decayera como muy bien refleja los diarios de la época: “Que la mínima efusión de sangre del volcán de la raza, resurja grande y respetada la silueta venerable de la España única, indivisible, comprensiva, justa,conforme a su gloriosa tradición de orientadora y educadora de pueblos”.
El pasado 25 de julio de 2020, gracias a un grupo de patriotas oscenses que con el tesón que caracteriza al pueblo aragonés han conseguido, con mucho esfuerzo y trabajo y no pocas trabas, hacer resurgir del triste olvido la memoria de aquellos voluntarios que entregaron su mayor tesoro, sus jóvenes vidas recuperando el acto homenaje “Voluntarios de Santiago”.
En primer lugar se celebró una misa en su honor por el eterno descanso de sus almas con una pequeña ofrenda floral donde no podían faltar las cinco rosas acompañadas de sendas coronas.
Posteriormente, se acudió a la posición de Estrecho Quinto donde coloca una placa conmemorativa en la cruz que desde el alto sigue mirando a los luceros que dieron su vida en esta tierra.
Acto seguido se pronunciaron varios discursos entre ellos el del General Coloma en representación de la FNFF y el Jefe Territorial de La Falange en Aragón, camarada Eduardo J.J.
Tras estas palabras, se procedió a entonar “Yo tenía un camarada”, “Falangista soy”, “Himno español”, “Cuando la pena nos alcanza”, “Cara al sol” y por último un alto y claro “PRESENTE” por los voluntarios caídos de Santiago.
