El actual gobierno del frente popular es capaz de todo, de todo lo que sea malo para la España a la que odian y de todo lo que sea bueno para sus intereses políticos y económicos. Si no derriban la cruz del Valle de los Caídos no será por falta de ganas, sino, porque no les convenga políticamente. Y porque si no lo hacen hoy, siempre les quedará esa bala en la recámara de su pistola humeante de disparar contra España para utilizarla cuando les convenga. Y saben utilizar muy bien sus balas y no hablo sólo metafóricamente.
La nueva Ley de Memoria Democrática es la guinda a esa tarta envenenada de manipulación, odio, sectarismo y persecución que está en el horno desde 1975 y que de vez en cuando sacan y reparten para envenenar a los españoles. Españoles que se zampan su ración de tarta envenenada con sumo gusto, todo hay que decirlo, en lugar de estamparles a la cara esa tarta tóxica a quienes se la ofrecen.
Esta ley es sólo la continuación de toda la mentira histórica que todas las instituciones del régimen del 78 han impuesto en España en todos los órdenes, en los parlamentos, en los medios de comunicación y en los centros de enseñanza, desde guarderías a universidades, desde hace ya 45 años. Y esta ley, como la vigente Ley de Memoria Histórica, quiere lograr unos objetivos muy claros y los está consiguiendo: quiere manipular la historia, quiere ocultar los crímenes de sus antepasados ideológicos, quieren tener argumentos (falsos argumentos) históricos para perseguir judicial y policialmente a sus enemigos políticos de verdad (a nosotros los patriotas), no a aquellos con los que se toman café en los bares del parlamento.
Quieren, también, evitar que la gente que no conoce lo que ocurrió en un pasado aún reciente de la historia de España, tenga opciones de conocer la verdad y comparar gobernantes de unas épocas con otras, combatientes de un bando y del otro, que sepan qué políticos fueron asesinados y por quiénes…Vamos, quieren imponer la mentira porque la verdad les asfixia como criminales que son, criminales porque defienden a otros criminales desde hace décadas y criminales por sus acciones en la España de los últimos 45 años.
Con estos tipos de Ley de Memoria Histórica o Democrática, ya han conseguido manipular todo lo ocurrido en España desde los años 30 a los años 70 del siglo XX, pero es más, con otros comportamientos y leyes ya han conseguido blanquear al FRAP y a la ETA, tenemos a terroristas en las instituciones y pronto impondrán por ley su memoria democrática de que las víctimas de ETA (entre ellas más de 1000 asesinados) se merecían lo que los valientes gudaris les hicieron y que los etarras son héroes, de hecho, algunos ya lo creen y no sólo en Vascongadas.
Pronto nos dirán que los “Rodrigos Lanzas” de turno, esos asesinos de extrema izquierda, también son héroes y los asesinados como Víctor Laínez son los asesinos. De hecho, a Rodrigo Lanza ya lo han blanqueado y defendido políticos y periodistas españoles cuando dejó tetrapléjico a un guardia urbano de Barcelona y después otra vez tras asesinar a Víctor Laínez, al falangista Víctor Laínez. Así que no estoy diciendo nada que sea imposible de cumplirse sabiendo los antecedentes que hemos padecido hasta ahora.
Y harán lo que quieran porque no tienen a nadie enfrente que no seamos los de siempre, los patriotas a los que se encargan de satanizar, de detener, aquellos a los que nos calumnian, o incluso nos encarcelan sin que nadie luche a nuestro lado, unos, por el miedo que les han hecho creer de lo que somos, otros, porque situarse al lado de aquellos a los que pueden encarcelar les puede suponer a ellos también la cárcel.
No harán nada ni la Conferencia Episcopal, ni el Rey, ni los partidos políticos del régimen 78, ni los militares, ni nadie porque todos ya están envenenados por esa tarta tóxica de la que hablaba antes, eso si no están de cocineros preparándola y con mucho gusto.
Y para todos aquellos a los que frente el asesinato de España en distintos frentes: el político, el social, el moral, el de identidad, el histórico… la única respuesta que ofrecen es la de recursos ante los Tribunales Constitucionales, Supremos…etc, sólo recordarles que abandonaron las calles cuando se estaba arrinconando por fin a los separatistas para dejar la lucha en manos de un Tribunal Supremo que no ha hecho justicia con los golpistas separatistas y que estos siguen el poder, y los pocos que habían ido a la cárcel están en las calles.
Recordarles que, abandonaron las calles para que la única respuesta a la profanación de Franco fuera exclusivamente judicial, y por supuesto, los tribunales no les dieron la razón y la tumba de Franco fue profanada.
Recordarles que, los 14 patriotas de Blanquerna van a entrar en prisión por gritar: “¡Cataluña es España!” en un acto separatista porque los tribunales españoles, estos en los que tanto confían, se han puesto del lado de los separatistas una vez más. Y así podría estar todo el día citando traiciones de los tribunales en los que algunos confían tanto.
Jamás desde dentro del sistema que odia y asesina a España vendrán las soluciones a los males de España, así que, esperar soluciones del propio sistema a sus crímenes, ya no sólo es de ingenuos, sino de cómplices de los criminales, y los cómplices de los criminales, son criminales.