El pasado 2 de abril tuvo lugar en Madrid el Acto de Homenaje y Desagravio a nuestro camarada asesinado por pistoleros socialistas, José García Vara, sucedido en un mismo día, pero del año 1935, tras la vil retirada de la placa, con nocturnidad y prevaricación, que recuerda el hecho, por el revanchista Ayuntamiento de Madrid. Acto organizado por la Coordinadora contra la «ley de memoria histórica», que como no podía ser de otra manera, La Falange forma parte.
El mismo, con la presencia de numeroso público y de varios de los representantes de las organizaciones que conforman la «coordinadora», dio comienzo con la ofrenda floral que una camarada depositó junto a la placa conmemorativa. A continuación, tuvimos el honor de escuchar todos los presentes unas palabras de profundo agradecimiento del sobrino de nuestro Caído. Inmediatamente después se procedió a la lectura de la «Oración por los Caídos de la Falange», a cargo del camarada Jefe Nacional del SEU, Pablo Reinoso.
Seguidamente, se dio paso a los oradores, comenzando en primer lugar el representante del Foro Social Manuel Mateo. En segundo lugar, el Jefe Nacional de La Falange, camarada Manuel Andrino, nos regaló un discurso claro y directo, sincero y sin rodeos, como nos tiene acostumbrados, discurso que reproducimos a continuación.
El acto lo finalizó, con unas emotivas palabras, el Presidente de la Hermandad de la Vieja Guardia, camarada Carlos Batres, en recuerdo de nuestro camarada caído, José García Vara. Cerró el acto el himno de amor y guerra, el himno de la Falange, el Cara al Sol, y un emotivo Yo tenía un Camarada.
CAMARADA JOSÉ GARCÍA VARA
¡¡PRESENTE!!
DISCURSO DE MANUEL ANDRINO, JEFE NACIONAL DE LA FALANGE
Buenos días Camaradas y amigos:
Los falangistas estamos hoy aquí, junto al resto de organizaciones que conforman la Coordinadora contra la llamada “Ley de memoria histórica” para recordar, NO SOLO a nuestro camarada JOSÉ GARCÍA VARA, sino para impedir que se insulte de forma impune y gratuita la memoria de miles de españoles, –no solo falangistas- que fueron asesinados de forma vil y cobarde, por los que de una u otra forma representaban a la II República.
Esa II República que nos llevó al caos, a la ruina, a la barbarie y finalmente a la Guerra Civil.
Por eso, nosotros estaremos junto a los Alféreces Provisionales y junto a los miembros de la División Azul; pero también, junto a los miles de religiosos y religiosas que sufrieron persecución, que fueron detenidos y torturados, para finalmente ser asesinados.
NO haremos como intentan algunos, entre otros la Jerarquía de la Iglesia Católica, cuando se desmarca del resto de asesinados (falangistas, requetés o militares), como si intentaran esconder la realidad de lo sucedido.
Y la realidad fue, que los cerca de 7.000 sacerdotes, religiosos y religiosas muertos por la represión de aquella “democrática II República”, lo hicieron junto a nuestros camaradas, mal que le pese a algún Obispo, Cardenal o incluso al Papa.
Y es que los 402 Santos y Beatos que hasta el momento reconoce la Iglesia Católica como mártires en suelo madrileño, comparten Fosas Comunes con falangistas por ejemplo en Paracuellos o en Aravaca.
Por eso, cuando quitan del cementerio de Carabanchel la placa que recuerda a los Carmelitas allí asesinados, a los falangistas nos duele tanto como cuando derriban el monumento erigido a los Alféreces Provisionales (muchos de ellos falangistas por cierto), o cuando arrancaron a martillazos esta placa en recuerdo a GARCÍA VARA.
Tampoco podemos entender la actitud, un tanto mísera, de aquellos que intentan salvar el nombre de una calle, o el recuerdo en una placa, defendiendo la idea de que, por ejemplo la División 250 de la Wermatch fue una unidad militar ajena a la guerra civil; O que Millán Astray, fundador de La Legión, ya estaba retirado cuando dio comienzo esa misma guerra civil.
Vamos a dejarnos de tonterías y de complejos estúpidos.
La División 250 de Voluntarios, pese a quien le pese, ha pasado a la historia y se la va a conocer para siempre, como la DIVISIÓN AZUL por su carácter netamente falangista; y por otro lado, no creo que Millán Astray fuera mas legionario que Yague o que el mismo Franco, ambos decisivos en los tres años que duró la Guerra Civil.
Hay que ser hipócritas y un poco cortos de mente, para no darse cuenta de lo que verdaderamente pretenden todos estos que forman parte de la “basura democrática” que aprobó la llamada Ley de Memoria Histórica, en esa cueva de corruptos, ladrones, chorizos y traidores, llamado Parlamento Español.
Y lo que pretenden es, ni mas ni menos, que borrar una parte de la historia, mintiendo sobre la verdad de lo sucedido, y como verdaderos TALIBANES, arrancar placas, monumentos y calles, para reescribir a su antojo y a base de mentiras, lo que realmente sucedió en aquella nefasta II República.
Aquella II República, donde se instauró la persecución, las detención arbitraria, la tortura y finalmente el asesinato, como arma política contra todo aquel que no formara parte del Frente Popular.
Aquel Frente Popular y aquellos separatistas que en octubre del año 34 dieron un auténtico golpe de Estado contra su tan querida y cacareada II República.
Y lo hicieron a base de dinamita y de asesinatos indiscriminados, llegando a proclamar de forma ilegal y unilateral la independencia de Cataluña, causando cientos de muertos en Asturias, en León, en Cataluña y aquí mismo, en Madrid.
Suponemos que esa parte de la historia también la querrán esconder en el mismo armario, donde esconden los cientos de asesinatos de falangistas cometidos por sus bandas de pistoleros a sueldo.
Falangistas que como nuestro camarada JOSÉ GARCÍA VARA, cayó bajo las balas de los comunistas que jamás le perdonaron su pasado, y el que defendiera la verdadera JUSTICIA SOCIAL desde las filas de La Falange.
Uno más acribillado a balazos, antes de aquel 18 de julio del año 36, en el que una parte de los españoles ya no iba a soportar por mas tiempo el que les cazaran como a conejos.
Porque estos que ahora van de superdemócratas, de animalistas antitaurinos, y de defensores hasta de la garrapata peruana, son los mismos que entonces inventaron las checas y los “paseos”, que en Madrid se sufrieron como en ninguna otra parte.
Porque aquí, en Madrid, mal que le pese a la perroflauta de alcaldesa, se asesinó como en ningún otro sitio.
Y lo importante de las matanzas que ejecutaron socialistas, comunistas y anarquistas en Madrid, como bien dice el Historiador y General, Rafael Casas de la Vega, no solo es su número, sino las condiciones personales de las víctimas y las circunstancias en que se produjeron.
Porque no es lo mismo matar militares, que matar curas. No es lo mismo matar frailes, que violar y matar monjas. Hombres que mujeres. Ricos que pobres. O jóvenes que viejos.
No es lo mismo asesinar en descampados, que asesinar en la ciudad. O hacerlo por la noche, a realizarlo a plena luz del día; Como resulta distinto matar a individuos sueltos, que a grandes grupos de personas.
Y no es lo mismo hacerlo en un coche robado, en la Dehesa de la Villa o en la Pradera de San Isidro, que emplear para ello los autobuses de la Empresa Municipal de Transportes de Madrid, para llevar a miles de presos a asesinar a Paracuellos; O desalojar un tren entero, en Vallecas, asesinando con ametralladoras a todos, absolutamente a todos sus ocupantes.
Nos hablan de romper la legalidad de la II República, los que acaban con los falangistas y militares, convertidos ya en prisioneros de guerra, una vez rendido el Cuartel de la Montaña.
Los mismos que crean un gigantesco aparato represor a través de las checas del PSOE, del PCE, de la CNT, de ER, o la gran checa del gobierno, la de Fomento.
Los que asesinan a diputados como Calvo Sotelo, en un vehículo de la Guardia de Asalto al mando de un capitán de la Guardia Civil, con las armas disparadas por la escolta del dirigente socialista Indalecio Prieto.
CAMARADAS: Nosotros no vamos a hacer distingos entre, por ejemplo, los falangistas que junto a militares y guardias civiles murieron en Asturias en Octubre del año 34 defendiendo la legalidad de la II República frente a los Revolucionarios marxistas; y los 68 falangistas asesinados desde las elecciones de febrero del 36 hasta el inicio de la Guerra Civil. Ni con los miles que murieron víctimas de la persecución en Zona Roja, o combatiendo en el Alto de los Leones, en Alcubierre o en Belchite.
Como tampoco vamos a renegar de aquella Primera Línea, de aquella Falange de la Sangre, que supo ganar gloria y honor en Sevilla, en Extremadura o en Madrid, dando cumplida respuesta a la represión sufrida.
El victimismo no va con nosotros. Hicimos lo que tuvimos que hacer en una situación extrema, y el Honor de nuestros CAÍDOS jamás podrá ser borrado aunque quiten esta placa de recuerdo a GARCÍA VARA, o cambien el nombre a la calle de los HERMANOS GARCÍA NOBLEJAS, quienes dieron un ejemplo único e imborrable de lucha y de sacrificio.
Por eso, esta alcaldesa que anda de la cabeza mas para allá que para acá, y que a pesar de ser exjueza, se ha saltado la legalidad, “su legalidad” a la torera, prevaricando de forma clara, NUNCA podrá acabar con el recuerdo que se merecen nuestros camaradas.
Ya sabemos que ella prefiere andar con titiriteros pro-etarras o pro-yihadistas; Organizando una parodia de cabalgata de Reyes para ofender a los católicos; O nombrando como portavoz del Ayuntamiento a una asalta capillas, ya condenada.
Pero de toda esta tropa, es lo que esperamos. Son los mismos de la checa.
Lo que más nos llama la atención es la actitud mísera y ruin de la derecha del PP, que con su tradicional cobardía y su silencio sepulcral, permite que la llamada Ley de Memoria Histórica siga vigente, a pesar de haber contado los últimos cuatro años, con mayoría absoluta para acabar con ella, y mandarla a la basura, que es donde mejor puede estar.
Estos mismos del PP, que en la mayoría de los casos reniegan de sus padres y de sus abuelos, pero solo a efectos ideológicos, aprovechándose, y de qué manera, de la situación económica y de la posición social que aquellos les dejaron, en muchos casos, al amparo del Régimen anterior.
Estos chorizos del PP, que parece ser que no han tenido tiempo mas que para vaciar las arcas de ayuntamientos y comunidades autónomas, a la sombra de los Rodrigo Rato, Bárcenas y Rita Barberá de turno, en lugar de acabar con leyes como la del Aborto, o plantar cara a desafíos separatistas como el de Cataluña.
Un PP, que pensaba que con una pretendida recuperación económica que solo llega a los bolsillos de los mas pudientes, iba a ser capaz de engañar de nuevo a los españoles que todavía le otorgan ese estúpido voto útil, con un programa electoral que incumple una vez si y otra también.
Un PP que con personajes como esta tonta del bote de Presidenta de la Comunidad de Madrid, que piensa que insultando y persiguiendo a falangistas y a otros patriotas, la van a dar el certificado de “la progre mas guay del año”.
Un PP, que como el PSOE, Podemos o Ciudadanos, forman parte de este puñetero sistema liberal que ha generalizado la corrupción con la protección de esta Monarquía que ha institucionalizado el amiguismo, el pelotazo y el choriceo, mientras permite y consiente los insultos permanentes a España y a sus símbolos.
Y entre esos símbolos y aunque les pese, se encuentra esta placa.
Porque mientras los que les mataban decían: VIVA RUSIA y MUERA ESPAÑA, los falangistas siempre caían gritando ARRIBA ESPAÑA.
Por eso yo os pido que gritéis conmigo, Camarada JOSÉ GARCÍA VARA ¡¡PRESENTE¡¡