El pasado 1 de Noviembre, el camposanto de los Mártires de Aravaca volvió a reunir a familias, religiosos, falangistas y demás españoles que quisieron recordar a los 800 asesinados en ese lugar por el Frente Popular, durante esos meses trágicos de 1936 en los que 20.000 madrileños indefensos fueron ajusticiados.
Religiosos, seglares, intelectuales como Ramiro de Maeztu, monárquicos, militares… y falangistas como Ramiro Ledesma Ramos; mayoritariamente en sacas organizadas desde cárceles y chechas. Todos ellos Mártires y Caídos por Dios y por España que nos dejaron ese legado imborrable de dignidad frente a la brutal barbarie que allí mismo cometieron socialistas, comunistas y anarquistas.
Al finalizar el oficio religioso, los falangistas, con nuestros ritos y ofrendas recordamos a todos los allí Caídos y en especial al camarada Ramiro Ledesma Ramos, ideólogo del Nacionalsindicalismo y carné nº1 de Falange.
Cinco rosas y la oración a los Caídos para dar paso a las palabras del Jefe Nacional de Juventudes, camarada Fernando Maqueda: en un discurso lleno de compromiso y actualidad hizo un llamamiento al activismo militante sin olvidar el mayor patrimonio que disponemos los falangistas, la sangre de nuestros Caídos.
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Finalizó el acto, el jefe Nacional de La Falange, camarada Manuel Andrino, recordando a propios y extraños por qué y por quiénes fueron asesinados estos 800 españoles y que, frente a actitudes cobardes, vergonzosas y mezquinas de otros, La Falange no dejará de recordarles y honrarles como su sacrificio merece.
El próximo domingo, 11 de Noviembre, será la ocasión de recordar al camarada Alejandro Salazar, jefe Nacional del S.E.U. y al resto de los cinco mil asesinados en Paracuellos del Jarama.
Frente a su barbarie, a su odio y a su manipulación histórica, La Falange continuará honrando a todos aquellos que han dado su vida por la causa de España.
