El “supernumerario” miembro del OPUS DEI, y a la sazón ministro del interior de lo que queda de España, sigue empeñado en que muchos patriotas, no puedan acudir mañana 12 de Octubre a Barcelona.
Para ello tiene pensado, incluso, secuestrar a los ocupantes de cuantos autobuses se dirijan a Barcelona en el día de mañana. Porque retener contra su voluntad, sin ningún tipo de imputación a decenas de personas, es un secuestro en toda regla que no permitiremos.
Imaginamos que también pararán los AVE con destino a la ciudad condal y los aviones que aterricen en El Prat, para “criminalizar” a todos aquellos que mañana puedan llegar a “molestar” a los separatistas con su presencia.
Menos mal que no somos los únicos a los que se intenta, e incluso se consigue, impedir el paso por Barcelona. Recordemos que nuestro ejército ya no puede desfilar por allí desde hace muchos años y que, sin ir más lejos, nuestra laureada selección de fútbol tampoco puede jugar en campo barcelonés alguno.
Qué siga así este pepero ministro catalán del interior, hermanísimo de ese otro cómplice de la situación en que nos encontramos, porque riéndole las gracias a los separatistas e incluso haciéndoles el juego sucio, le van a pagar con la moneda del desprecio, del insulto y de su expulsión en un futurible “estado catalán asociado”.
Para ello contará con la colaboración necesaria e incluso entusiasta de los mercenarios del sistema, que como vemos en el cartel de más arriba, van “a la limón” con los rojetes de CC.OO, suponemos que también a la hora de desviar los dineros de los fondos de formación para engordar las buchacas de los sindicatos y las suyas personales.
Y estos son los que quieren ilegalizarnos: Una panda de chorizos y ladrones.