Mientras se pone de patitas en la calle a asesinos y criminales de ETA, con decenas de asesinatos a sus espaldas, la Fiscalía persigue con todo el aparato del Estado a supuestos «falangistas», que como mucho se dedicaron a dejar claro que por mucha Ley de Memoria Histórica que haya votado un Parlamento corrupto, y por mucha negociación con terroristas que haya votado ese mismo Parlamento cobarde, siempre habrá un puñado de españoles dispuestos a dar a conocer la verdad de lo que sucedió en aquella criminal II República y en esta funesta democracia donde cerca de mil españoles murieron a manos del terrorismo separatista vasco y miles quedaron heridos o mutilados de por vida, produciéndose un auténtico apartheid contra todos aquellos que pensaban o sentían en español.
No importa su persecución policial y mediática contra falangistas y patriotas, porque cuanta más fiera sea, más contundente será nuestra respuesta.
¡ARRIBA ESPAÑA!
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