Le ha faltado tiempo al cobarde y traidor director general de la Guardia Civil, Arsenio Fernández de Mesa, para destituir a un hombre de honor, y sobre todo bien nacido, de su puesto al mando de los G.R.S. de Valdemoro.
Estamos hablando del hijo de Antonio Tejero Molina, también teniente coronel como su padre, que tuvo la «osadía» de invitarle a una comida hace unos días y reconocerle en público que España últimamente no estaba sobrado de militares dispuestos a darlo todo por la Patria, y no por la pasta.
Recordamos que Fernández de Mesa no es otro que quien no sabe qué hacer ante las repetidas invasiones en nuestras fronteras de Ceuta y Melilla, dejando solos a los guardias civiles que se juegan el tipo un día sí y otro también, y que pretende esconder su pasado en El Ferrol, en los años 70, donde coqueteaba con mucha frecuencia en los ambientes llamados «ultras» de la ciudad que viera nacer a Francisco Franco.
«Estos hombres, cuando salían de sus cuarteles o de sus comisarías, siempre dirigían una postrera mirada a la bandera que presidía sus vidas, única representante de nuestras glorias y sacrificios y futura mortaja para nuestros mártires. Sin embargo, en el proyecto de Constitución hay demasiadas banderas haciendo sombra a la Única, alguna de ellas creada expresamente por y para el separatismo » 
Antonio Tejero Molina – Teniente Coronel de la Guardia Civil.