La Vuelta Ciclista a España ha servido de escaparate para que los catalanes, que se sienten españoles, lo demuestren en las calles de Cataluña.
Lo vivido el 6 de septiembre en el final de la etapa de ayer, en Castelldefels, es difícilmente descriptible y profundamente sorprendente: Las calles de la ciudad barcelonesa se poblaron de innumerables banderas de España para recibir un evento deportivo que recorre todo el suelo patrio.
Acudimos a la cita, dispuestos a enfrentarnos al cáncer separatista que es omnipresente. En colaboración con otras organizaciones patriotas, fuimos dispuestos a que “también” se vieran nuestras banderas y se oyeran nuestras voces. Pero, lo que nos encontramos fue algo totalmente inesperado: Por cada bastarda bandera separatista,mínimo, había 20 españolas.
Asistimos sin duda a un día de explosión españolista, que nada tiene que ver con los éxitos de la selección de fútbol. Lo de Castelldefels tiene una dimensión social y política de muchísima más envergadura. Los vecinos de la ciudad se expusieron durante horas y también sus ventanas y balcones, mostrando alegremente que se sienten lo que son: Españoles.
Esperemos que no sea flor de un día; Para que sea fructífero seguimos trabajando día a día; con la mirada puesta en el próximo 12 de octubre; Un 12 de Octubre donde La Falange junto al resto de camaradas de“La España en Marcha” nos manifestaremos en Barcelona.