Las organizaciones falangistas no dudamos en salir a las calles de Madrid para defender junto a la plataforma SOS Rural las necesarias reivindicaciones del mundo rural.
Una multitudinaria manifestación alejada de los partidos y asociaciones de siempre. Un renovado camino de lucha que hace bandera de la dignidad del campo sin miedo a señalar a los diferentes responsables de la extrema gravedad que viven agricultores, ganaderos y la mayoría de pueblos de España.
Reivindicaciones que La Falange siempre ha defendido, conscientes de la importancia de los sectores primarios en la edificación de una Patria justa y sana. Y de la importancia de los pueblos en nuestra identidad como Nación.
A la nefasta gestión de estas últimas décadas de los diferentes gobiernos nacionales y autonómicos se suma nuestra falta de soberanía, hoy regalada a esa entidad llamada Unión Europea que no sólo no protege nuestra producción, sino que favorece la competencia desleal de terceros países que no cumplen con las regulaciones que a nosotros sí nos exigen.
Y a todo ello, ahora nos encontramos con ese falso ecologismo de ciudad que destruye nuestros campos y montes. Un falso ecologismo que, sin entender la naturaleza real provoca ruina económica, despoblación y sequía. Una ruina generalizada, salvo para aquellos que están detrás de toda esta ingeniería urbanita que hasta se atreve a señalar de maltratadores a nuestros ganaderos o a destruir presas y pantanos.
Frente al Ministerio de Agricultura, en defensa del Campo, apoyando a agricultores, ganaderos y cazadores.
¡El Campo sí, Bruselas no! #ArribaElCampo pic.twitter.com/slMmPAwma6
— Manuel Andrino Lobo (@ManuelAndrino) May 14, 2023
No es cuestión de subvenciones, es cuestión de favorecer y proteger la producción local y nacional además de asegurar que los habitantes de nuestros pueblos tengan acceso a servicios públicos dignos. Se trata de abandonar las políticas de la agenda 2030 que quiere convertirnos en un chiringuito desértico de sol y playa para turistas. Y para todo ello no hay otro camino que dar la espalda a todos los partidos que pululan en los parlamentos y recuperar nuestra soberanía, abandonando la Unión Europea.
