Tras un período de análisis de la realidad tanto externa como interna, después de un debate sosegado, apegado al terreno, en el que ha primado el deseo de aunar voluntades, siendo conscientes de que la situación que atraviesa España nos obliga, por coherencia y por conciencia, a no quedarnos quietos, a dar la batalla política en las mejores condiciones posibles, optimizando recursos materiales y humanos, asumiendo que existe un número importante de españoles dispuestos a seguirnos y apoyarnos, nuestras organizaciones han decidido ofrecer, a los que siguen creyendo en la idea y el concepto de España, en nuestra identidad como nación, una opción electoral viable. Una opción de trabajo y de ilusión abierta a la colaboración e integración de quienes quieran participar; dispuesta a estar en la calle, en campaña permanente, impulsada por el deseo de acabar con las amenazas que penden sobre la continuidad de España como nación única, libre y soberana.
Tenemos voluntad de llegar a las instituciones, pero, sobre todo, de recuperar y ganar un espacio político que está ahí. Ese que surge todos los días en las conversaciones, en la reacción individual del español de a pie harto de corrupción, recortes, falta de política social, desprecio a la Patria, incapacidad para mantener la ley, desigualdad de derechos, pérdida de soberanía nacional y económica…
Por todo ello, inicialmente, esperando que otros grupos se sumen atraídos por la propuesta de aliarnos por España, como tantos nos han demandado, FE de las JONS, Democracia Nacional, La Falange (FE) y Alternativa Española, demostrando que somos capaces de converger en una base común, hacen pública la firma de un acuerdo conformando una coalición que comparecerá como tal en las próximas elecciones europeas. En una campaña que para nosotros comienza hoy.
Lo hacemos porque somos conscientes de que es mucho lo que la integridad, la soberanía y una justa política socioeconómica se juegan los españoles en la UE; porque queremos tener voz sobre lo que también se decide en esa Europa que no nos gusta, que se aleja cada vez más de sus raíces para perderse en un multiculturalismo demoledor; esperamos hacer frente en las instituciones a esa falsa Europa que renuncia a implementar políticas en defensa de la vida y promoción de la familia. En definitiva, denunciar esa UE que nos suma a las filas cada vez más amplías del euroescepticismo, que nos sitúa frente a la Eurocracia. Queremos otra Europa, esa que cada vez más europeos reivindican con un voto disidente, que va más allá del monopolio popular-liberal-socialista que controla en connivencia las instituciones europeas. Queremos estar allí, y para ello vamos a trabajar, para defender desde los escaños los intereses de España y los españoles.
Comisión Gestora