Este gobierno del Frente Popular, apoyado por lo más rastrero del panorama político español, incluidos terroristas y separatistas golpistas, ha lanzado de forma inequívoca el mensaje que estaban esperando las ratas independentistas que gobiernan en Cataluña, y que no es otro, que anunciar de una forma más que evidente que, sea cual sea el resultado del juicio que se iniciara en breve contra toda esa canalla que promovió, y sigue promoviendo, la separación de Cataluña del resto de España, se les va a indultar SÍ o SÍ, y el jefe del estado, los tendrá que firmar SÍ o SÍ, dada su condición de «florero» en toda esta «historia». Bueno, en ésta y en el resto.
No es nada nuevo, porque ya el Frente Popular que manipuló el resultado electoral de febrero de 1936, indultó a aquel mal nacido llamado Companys, y a todos aquellos asesinos y criminales que promovieron la revolución de octubre del 34 y el golpe de Estado de la Generalidad contra el gobierno de la II República.
¿Y para qué le indultó? Pues para que pudiera volver a ser de nuevo Presidente de la Generalidad y convertirse en el mayor asesino de Cataluña durante la Guerra Civil, donde acabó con más de 8.000 personas de forma directa solo en Cataluña, a los que mandó a la «fosa» sin que le temblara en absoluto el pulso.
Como indultados fueron todos aquellos hijos de perra de ETA, del GRAPO o del FRAP, y que lo fueron para volver a asesinar a cientos de españoles y causar miles de heridos y la ruina y el desconsuelo en cientos de miles de ciudadanos, no sólo vascos, que tuvieron que huir, ante el riesgo más que cierto de ser asesinados. Porque aquel periodo nefasto, oscuro y siniestro de la historia de España, llamado Transición, entre otras «joyas» nos obsequió con «ésta» del indulto a todo tipo de asesinos convictos y confesos. Pero claro, como habían matado en nombre de la «libertad de la izquierda», pues eso: a callar y a indultar.
Van a poner en la calle a todos estos «mierdas separatistas» para que vuelvan a hacer lo que ya hicieron y lo que siguen haciendo los suyos en Cataluña. O sea, buscar el enfrentamiento civil y la limpieza étnica de esa parte de la población que siente, vive y piensa en español en aquella región española como la que más.
El compadreo está servido y la negociación con terroristas liberados y separatistas encarcelados, ha dado su fruto.
Bienvenida la «democracia» y su falta de escrúpulos. Y vivan los indultos a los traidores y a los asesinos.
