LA DEFENSA DE ESPAÑA: Unidad, ilusión y futuro.
Este momento de extrema gravedad sobre nuestra integridad territorial viene de largo. Todo empezó con la Constitución del 78. Esta Constitución se redactó para favorecer a los que no creen en España y quieren romperla. Se introdujeron nuevos y falsos conceptos en la historia de España: Los de “nacionalidades históricas” y de “comunidades autónomas” que se recogen en el título VIII y en el art.2.
No sólo se cometió esta aberración jurídica y falsificación histórica, sino que se fragmentó a España en 17 comunidades enfrentadas, lo que ha supuesto un fracaso económico (un gasto desorbitado) y, lo que es más grave, un fracaso territorial y un debilitamiento del Estado que ha perdido su esencia como suprema unidad orgánica de convivencia.
Todo este proceso se ha agravado por la complicidad de los sucesivos Gobiernos -tanto de derechas como de izquierdas- que han cedido alegremente a las exigencias de los que odian a España misma.
Nuestra Patria está frente a su propia desestructuración, con la amenaza separatista de Cataluña y las Vascongadas. Estamos padeciendo una de las mayores épocas de corrupción, el nivel de paro más grande de Europa y una decadencia moral y espiritual muy peligrosa.
Por todo esto La Falange exige la suspensión de la autonomía catalana y la suspensión del injusto e insolidario cupo vasco, así como la total disolución del Estado de las autonomías. Así mismo, nuestro movimiento aboga por la inmediata ilegalización de partidos, movimientos y organizaciones que atentan contra la sagrada unidad de España.
La Falange cree que ya ha llegado el momento de aplicarse contra los separatistas. Hay que acabar de una vez por todas con las desigualdades territoriales de nuestra España y avanzar con paso firme y seguro hacia la Justicia Social de todas las regiones, especialmente en las más desfavorecidas.
SEPARATISMO ES DIVISIÓN ENTRE HERMANOS.
DEFENDAMOS LA UNIDAD DE ESPAÑA Y EL FUTURO DE NUESTROS HIJOS.